miércoles, 6 de abril de 2011

El mercado español exige un nivel europeo mientras que sus condiciones no lo son

Los universitarios españoles se enfrentan a inciertas oportunidades laborales


Fuenlabrada, 6 de abril de 2011


El mercado español exige hoy en día a sus licenciados unos niveles de preparación e idiomas comparables a los del resto de los ciudadanos de la Unión Europea pero en cambio las condiciones laborales que oferta están por debajo de las de muchos de los países europeos.


Las empresas ofrecen puestos de becarios con contratos temporales pendientes de renovación. Los sueldos que proporcionan van de los 500 euros a los 1.000 en el mejor de los casos. Las jornadas laborales se presentan largas y no exentas de horas extras.


El Ministerio de Trabajo está sopesando el aceptar incluir como años trabajados un máximo de dos años realizados como becarios o en prácticas. El Pacto de Toledo ya recomendaba esta medida para que las personas que se encuentren en esta situación laboral si son despedidas no se queden sin paro, sin cotizar o sin cualquier tipo de prestación. La iniciativa no se aplicará a casos anteriores al año 2009.


Los licenciados españoles migran a otros países en busca de mejores condiciones de trabajo. Los becarios europeos ya disfrutan de esta ventaja que todavía se está planteando el Ministerio de Trabajo, es decir, de tener las mismas condiciones laborales que cualquier otro empleado. Los sueldos a los que acceden son, como mínimo, de 1.000 euros en la mayoría de los casos.


El año que viene los licenciados que salgan al mercado laboral tendrán que competir no solo entre ellos si no que también se les juntaran los estudiantes de grado. Dos generaciones tendrán que luchar por las plazas que estaban destinadas a una sola.


Lucía Ayllón Sánchez

domingo, 3 de abril de 2011

La fórmula de pago en internet se reaviva con el periódico The New York Time

Fuenlabrada, 3 de marzo de 2011


El periódico The New York Time alzó el 28 de marzo un muro de pago en su página web de manera que ya no se puede acceder a ella de forma gratuita. El debate sobre la opción a seguir, prensa de pago o gratuita en internet, se ha reabierto con este último movimiento del New York Time.


Este periódico, al igual que El País, ya intentó esta táctica en la década de los noventa con resultados nefastos. El hecho de que hasta ahora la información fuera de acceso gratuito en la web del New York Time supone un factor que puede desencadenar en dos posibilidades: la primera es que los lectores no acepten pagar por algo que ya se les ofrecía de manera gratuita y la segunda es que los usuarios estén dispuestos a suscribirse por el sentimiento de adhesión al medio.


La industria de la música, del audiovisual y de los libros está avocada al fracaso por no adaptarse a los nuevos tiempos. La era de internet no tiene por qué significar que se pueda acceder a todo de manera gratuita. Lo que el mercado no puede hacer es vender la descarga de un libro por 15 euros mientras que el real te cuesta 20.


El número de lectores en los últimos años ha ascendido hasta alcanzar en 2010 los 13.894 millones, sin embargo, la difusión ha descendido un 5,64%. La verdad estriba en el precio marcado a pagar. El hecho es que cuando algo es bueno y nos satisface no lo dejamos marchar. España se encuentra entre los ocho países que más dinero destina a su entretenimiento. El aumento de la cifra de lectores de periódicos verifica que nos gusta estar informados así que solo queda pensar que el fallo está en la estructura de mercado.


Lucía Ayllón Sánchez